El filipino Manny Pacquiao necesitó menos de tres minutos para demostrar por qué es considerado el mejor boxeador libra a libra del mundo, y con un nocáut fulminante en el segundo asalto liquidó al inglés Ricky Hatton, la noche del sábado en Las Vegas (Nevada).
Pacquiao, ahora con récord de 49 victorias, tres derrotas y 37 nocáuts, definió la pelea a los 2:59 minutos del noveno round, y le arrebató a Hatton el título súperligero de la Organización Internacional de Boxeo (OIB).
El ’PacMan’ filipino impuso además un récord de cinturones en seis divisiones: pesos mosca, pluma junior, pluma, ligero junior, ligero y súperligeros.
Hatton comenzó fogoso la pelea, tratando de intimidar a Pacquiao con sus embestidas, pero siempre encontró la derecha del asiático esperándole para frenarlo en seco.
Cuando faltaban 52 segundos del primer round, el rey filipino sacó un volado de derecha que envió al inglés a la lona por primera vez. Con ocho segundos para cerrar el cuadro, el tagalo repitió la dósis y Hatton volvió a caer de bruces.
En el segundo asalto ya se veía a un Hatton inseguro y la cara hinchada por los golpes, hasta que se desinfló por completo cuando Pacquiao le conectó derechazo seco a la cara, que le mandó de espaldas al cuadrilátero, donde quedó tendido por varios minutos, recibiendo atención médica.
Pese al apoyo de miles de fanáticos ingleses que todo el tiempo vitorearon a Hatton, éste encajó su segunda derrota en 47 combates, 32 de los cuales los había ganado por nocáut.
El británico venía de victorias sucesivas ante el mexicano Juan Lazcano, por decisión unánime, y el estadounidense Paul Malignaggi, a quien noqueó en el undécimo round.
Pacquiao, de su lado, había desmantelado en diciembre en Las Vegas al astro Oscar de la Hoya, con otro fuera de combate en el octavo asalto.
El filipino ha ganado por la vía de la anestesia sus últimas tres peleas y ocho de las 12 más recientes desde el 2006.
Pacquiao, ahora con récord de 49 victorias, tres derrotas y 37 nocáuts, definió la pelea a los 2:59 minutos del noveno round, y le arrebató a Hatton el título súperligero de la Organización Internacional de Boxeo (OIB).
El ’PacMan’ filipino impuso además un récord de cinturones en seis divisiones: pesos mosca, pluma junior, pluma, ligero junior, ligero y súperligeros.
Hatton comenzó fogoso la pelea, tratando de intimidar a Pacquiao con sus embestidas, pero siempre encontró la derecha del asiático esperándole para frenarlo en seco.
Cuando faltaban 52 segundos del primer round, el rey filipino sacó un volado de derecha que envió al inglés a la lona por primera vez. Con ocho segundos para cerrar el cuadro, el tagalo repitió la dósis y Hatton volvió a caer de bruces.
En el segundo asalto ya se veía a un Hatton inseguro y la cara hinchada por los golpes, hasta que se desinfló por completo cuando Pacquiao le conectó derechazo seco a la cara, que le mandó de espaldas al cuadrilátero, donde quedó tendido por varios minutos, recibiendo atención médica.
Pese al apoyo de miles de fanáticos ingleses que todo el tiempo vitorearon a Hatton, éste encajó su segunda derrota en 47 combates, 32 de los cuales los había ganado por nocáut.
El británico venía de victorias sucesivas ante el mexicano Juan Lazcano, por decisión unánime, y el estadounidense Paul Malignaggi, a quien noqueó en el undécimo round.
Pacquiao, de su lado, había desmantelado en diciembre en Las Vegas al astro Oscar de la Hoya, con otro fuera de combate en el octavo asalto.
El filipino ha ganado por la vía de la anestesia sus últimas tres peleas y ocho de las 12 más recientes desde el 2006.
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